Romper un huevo en un cuenco y añadir suficiente agua para que todo pese 65 gr. Batir un poco y reservar.
En otro cuenco, mezclar la harina y sal. Luego verter el huevo batido con agua y mezclar. Comienza a amasar con tus manos hasta que se una en una masa, unos 10 minutos. Es una masa dura, así que dale tiempo.
Formar un cuadrado mas o menos y cubrir con papel film. Dejar descansar por 30 minutos. Luego golpear la masa con un rodillo por unos 10 minutos. Esto ayudará a que se desarrolle el gluten sin tener que amasar tanto. Cubrir con papel film y dejar descansar otros 30 minutos.
Estirar la masa con un rodillo hasta que tenga un grosor de 1-2 mm. Luego cubrir ambos lados de la masa generosamente con harina para que no se pegue. Doblar la masa en 4 partes, sin presionar.
Con un cuchillo afilado, cortar tiras de 2 mm de ancho. Luego espolvorear más harina encima de los noodles y despegarlos con los dedos.
Hervir los Noodles
Poner una olla con 1.7 litros de agua, un poco de sal y 2 cdtas de bicarbonato de sodio a hervir. Meter los noodles en el agua y cocinar por 2-3 minutos o hasta que estén cocidos. Escurrir los noodles y pasar por agua fría para cortar la cocción.
Echar un chorrito de aceite y mezclar para que no se peguen. Ya están listos para ser usados en tu receta favorita. ¡A disfrutar!
Notas
No añadas más agua cuando veas que la masa es dura mientras la amasas. Tiene que ser así. Solo sigue amasando hasta que se una toda.
Pesa la harina y el huevo con el agua, la relación es 2:1
Cuando hiervas los noodles, comienza con 1 cdta de bicarbonato de sodio y aumenta según tu gusto.
Se pueden guardar en la nevera sin cocinar por 3 días.