Método fácil para preparar huevos salados. Es un acompañamiento típico de la cocina asiática. Por lo general suelen ser huevos de pato, pero se pueden sustituir por gallina.
Poner el agua y la sal en una cacerola. Llevar a ebullición y remover hasta que la sal esté totalmente disuelta. Dejar enfriar completamente.
Colocar los huevos lavados en un envase con tapa. Agregar el agua salda fría hasta cubrir todos los huevos. Cerrar la tapa y mantener en un lugar seco y sin luz por lo menos 14 días antes de usar.
Se consumen como huevos duros, en acompañamiento de distintos platos asiáticos. Para ello, se deben hervir como cualquier huevo normal.
Notas
Nota: para la versión más salada, deje los huevos hasta 21 o 28 días.